Estos días hay una gran controversia sobre la conveniencia o no de que los alumnos/as realicen deberes en casa. Son muchas las voces en contra de esas tareas que los profesores mandan realizar en casa, solicitando su total eliminación. A su vez, encontramos profesores que cargan a los alumn@s con infinidad de deberes.
La elección entre una y otra postura nos lleva a tener en cuenta diferentes parámetros que están relacionados con la educación. A pesar de todo no es una elección fácil de tomar, y siempre encontraremos razonamientos a favor y en contra.
Una posible solución pasa por un nuevo estilo de aprendizaje: la flipped classroom o «clase inversa».